Este castro fortificado de la segunda Edad de Hierro pudo ser levantado hacia el siglo IV a.C., conserva unas potentes defensas constituidas por fosos y parapetos que se pueden ver sin llevar a cabo trabajos arqueológicos. Además de este valor patrimonial, los Castros de Toiriz son punto de referencia para numerosas leyendas populares que dotan a este lugar de un misticismo especial. El conjunto castreño se encuentra profusamente informado con mesas explicativas después de la restauración llevada a cabo con el esfuerzo del "Colectivo pola Recuperación de Os Castros de Toiriz".